jueves, 20 de septiembre de 2007

Holanda

No sé si Holanda cuenta con algún corredor importante; creo que no. Pero lo que sí que he comprobado durante mis pasadas vacaciones es que mucha gente sale a correr. Sobre todo los fines de semana por las mañanas, y los días de diario al acabar la jornada, a partir de las 6.

Es un país sin cuestas ni montañas, ni apenas un mísero repecho, con lo cual correr puede ser muy placentero o para algunos un auténtico tostón. Para mí, ni lo uno ni lo otro.

Me reconfortó el ambiente saludable al pasear por los parques y cruzarnos con tantos corredores. Y también, por qué no decirlo, me dieron envidia. Mis zapatillas de correr se habían quedado en Madrid, pero daban unas ganas de acompañarles...

No hay comentarios: